- El baño turco es menos estresante que la sauna para el organismo.
- Para las personas que sufren estrés o ansiedad, el baño turco relaja el sistema nervioso.
- Aumenta la capacidad de intercambio de oxígeno en los pulmones y el sistema bronquial.
- Debido a los efectos del calor, los poros se dilatan limpiándose en profundidad. Esta reacción es muy beneficiosa para mantener una piel perfecta y unos poros libres de impurezas y puntos negros, evitando así que nos parezca el temido acné.
- Nos proporciona una alta eliminación de toxinas a través de la piel y el sudor que nos hace mantener la piel más limpia y mejor.
- El baño turco humedece las vías respiratorias por lo que ayuda en resfriados, tos, bronquitis y sinusitis.
- Ayuda a retrasar el envejecimiento de la piel puesto que permite una mayor oxigenación y revitalización de los tejidos.
- Es útil para aliviar los dolores de la artritis.
- Facilita la secreción del flujo vaginal y colabora en la limpieza de los genitales. Además, el calor ayuda a aliviar las menstruaciones dolorosas.